EL DERECHO A LA VIVIENDA, EJE TRANSFORMADOR
La presidenta Claudia Sheinbaum ha dejado claro que su gobierno tiene un compromiso profundo con la justicia social.
L@S COLUMNISTAS


La presidenta Claudia Sheinbaum ha dejado claro que su gobierno tiene un compromiso profundo con la justicia social. Lo demostró como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, donde fortaleció el papel del INVI, impulsó proyectos de vivienda accesible bien ubicados y mostró que desde el Estado se puede gobernar con rostro humano. Hoy, desde la Presidencia de la República, tiene la oportunidad histórica de llevar esa visión al siguiente nivel.
En este contexto, vale la pena mirar lo que está proponiendo Zohran Mamdani, legislador estatal en Nueva York. Su iniciativa, conocida como "Housing for All", plantea una inversión directa del Estado para construir 250 mil viviendas públicas destinadas al alquiler social. Sin intermediarios privados, sin especulación inmobiliaria. Vivienda como derecho, no como mercancía.
No se trata de copiar modelos al pie de la letra, pero sí de inspirarse en experiencias que están marcando camino. El proyecto de Mamdani apuesta por lo que también puede funcionar en México: vivienda pública de calidad, con rentas justas, en zonas bien conectadas, construida y gestionada desde el Estado para garantizar estabilidad y dignidad.
El sexenio que empieza puede marcar un cambio profundo. Así como Mamdani plantea un “New Deal” habitacional para Nueva York, Sheinbaum puede y debe impulsar un nuevo pacto por la vivienda digna en México. No como discurso, sino como política pública ambiciosa, con presupuesto, con músculo estatal, y con compromiso social.
Tenemos el talento técnico, la historia institucional y la legitimidad política para hacerlo. Solo falta voluntad. Y visión.
La presidenta ha demostrado que sabe escuchar, construir con base en evidencia y tomar decisiones firmes. El desafío de la vivienda necesita esa misma claridad: construir para vivir, no para especular. Pensar más allá del crédito y del mercado, y poner al Estado como garante del derecho a la vivienda.
Este es el momento. Como dice Mamdani, se trata de imaginar lo posible. Y la presidenta Claudia Sheinbaum tiene las condiciones, la legitimidad y la visión para hacerlo realidad en México.