La Lucha por el Sueño Robado

El proyecto DACA no es solo un programa legal; es el aliento de esperanza para miles de jóvenes que cruzaron fronteras con la inocencia de la niñez.

L@S COLUMNISTAS

Karla María Luján

9/11/20252 min read

El proyecto DACA no es solo un programa legal; es el aliento de esperanza para miles de jóvenes que cruzaron fronteras con la inocencia de la niñez. Ellos, los "Dreamers", han sembrado sus sueños en una tierra que los acogió, mientras en su interior llevan la añoranza de un hogar que a duras penas recuerdan. Su camino es un delicado equilibrio entre la gratitud y la incertidumbre, una vida tejida con promesas y el constante miedo a que el hilo se rompa.

Un puente hacia las raíces

El proceso para obtener DACA es un acto de fe. Cada formulario es un suspiro, cada documento, un fragmento de su historia. Es una danza de papeles que narra una vida de esfuerzo y perseverancia, un ruego silencioso por un futuro que se siente a la deriva. Sin embargo, no hay camino seguro hacia la ciudadanía, y la protección que ofrece es un refugio temporal en un mar de litigios.

Para aquellos que han conseguido el Advance Parole, el permiso de viaje es un regalo sagrado. Es un puente que se extiende al pasado, una oportunidad para reencontrar el latido de su tierra natal. Regresar y abrazar a la familia que solo han conocido a través de una pantalla es una experiencia que nutre el alma. En ese reencuentro, renace la promesa de llevar consigo el alma de su gente al regresar a Estados Unidos para continuar su legado.

Pero incluso en el gozo del regreso, la sombra del miedo es un fiel compañero. La incertidumbre política, avivada por figuras como el ex presidente Donald Trump, teje un velo de preocupación. El futuro de DACA es una brisa que puede cambiar de dirección en cualquier momento, obligando a los "Dreamers" a vivir en un estado de perpetua vulnerabilidad.

Así, la lucha de los "Dreamers" continúa, en un limbo que les pide vivir con el corazón en la mano, día a día. Ante esta realidad, la comunidad mexicana en el extranjero no está sola. El gobierno de la Cuarta Transformación, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores , ha levantado un faro de guía y apoyo, ofreciendo asistencia legal y un respaldo que les recuerda que su lucha es la de toda una nación.

Un ejemplo de este compromiso es el hermoso "Himno Migrante" del colectivo Legado de Grandeza. Más que una canción, es un eco de unidad, una melodía que sana el alma y celebra la fuerza y la identidad del mexicano en el extranjero. Es un recordatorio de que su viaje, aunque arduo, está lleno de propósito, y que su legado es una parte invaluable del corazón de México.